"La comida elige el vino".

Un prestigioso programa de vinos en un restaurante chino de alta cocina era algo casi inaudito. Cuando Christine Parkinson, responsable de compras de vinos, comenzó su andadura en el Grupo Hakkasan, le preocupaba no saber si los clientes adquirirían el gusto por el vino, y más concretamente por los vinos de alta gama, mientras disfrutaban de la cocina del restaurante.

En 2001, Parkinson se incorporó a Tao Group Hospitality, decidida a encontrar los mejores productos. En este viaje descubrió que los clientes respondían bien al maridaje de la comida china con vinos de primera calidad. Ahora, más de 10 años después, Hakkasan cuenta con casi 400 vinos en su amplio programa.

Brindis en grupo con vino

Parkinson pronto descubrió que no existía ningún cuerpo de conocimientos que hablara con autoridad sobre las reglas del vino y cómo maridarlo con la cocina china. Inspirada por esta oportunidad de innovación, Parkinson estableció sus propias reglas y normas, que más tarde se convirtieron en el espíritu del programa de vinos de Hakkasan. Sus reglas eran sencillas: cada producto debía ser de excelente calidad y combinar bien con la cocina. Así nació el programa de vinos de Hakkasan.

Desde su creación, el programa de vinos de Hakkasan ha marcado una pauta en la clasificación y selección de los vinos utilizados. Los vinos se clasifican en "Curious Vines: vinos distintivos", "Genius without a Château: los nuevos clásicos" y "Spiritual Wines", que explican a los clientes por qué se han seleccionado. Por ejemplo, "vinos espirituales" significa la producción biodinámica del vino, que refleja cómo se trata a las vides durante el proceso de vendimia.